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Genesis de

La obra « » se impuso a Régis como una evidencia, durante una meditación: el 2 de noviembre de 2015 vio una caja gigante que tenía tres espacios llenos de cuadrados y cubos incomprensibles. Busca títulos para comprender lo que había dibujado, sin resultado. Al día siguiente, el 3 de noviembre, durante una segunda meditación, el titulo se revela: dessine-moi un mouton, “díbújame un cordero”. Y allí comprende el croquis.

Régis siente entonces surgir en él la necesidad imperiosa de transmitir el mensaje humanista de Antoine de Saint-Exupéry, mensaje del que él estaba impregnado de manera inconsciente desde su infancia. El escritor, el hombre, el aviador, lo fascinan pues él se siente movido por las mismas aspiraciones. Como ocurre en el mundo, se siente inmediatamente identificado con el Principito. Como el hombre, él viajó a través del mundo. Apasionado por la aviación, se enroló durante dos años en las fuerzas aéreas con la ilusión de ser piloto. Pero después de dos años renunció a continuar por cinco años, teniendo el sentimiento de que iba a perder la libertad. Sostuvo una relación de amistad excepcional con Foxy, un zorro que se dejó domesticar, respondiendo a su nombre cuando Régis lo llamaba y que vivió durante cinco años a su lado en su pequeña cabaña en Cuesta Blanca, pequeña aldea en la campiña de Córdoba, en Argentina. En fin, él se descubre “naturalmente” en el amor por el ser humano.

Esta proximidad lo lleva a encontrarse en gestos cotidianos, cuando vivía en Nueva York durante seis años. Sentía mucha alegría alimentando las ardillas del Central Park, alegría que experimentaba también Antoine de Saint-Exupéry haciendo los mismos gestos, en el mismo lugar, en otra época. Esto se lo reveló Martina Saint-Martin, delegada Midi-Pyrénées (pirineos del sur) en el Espacio Fundación Saint-Exupéry.

Posteriormente se hizo evidente que esta influencia se hizo sentir desde los primeros tiempos en su trabajo artístico, en sus obras como “Itai doshin” que representa un corazón fusionado en múltiples capas; “Itai doshin” significa en japonés “diferentes por el cuerpo, uno en espíritu”, Neg’marron, que evoca la esclavitud, tema ampliamente evocado en Tierra de Hombres” en relación a Bark el viejo cautivo negro que Antoine de Saint-Exupéry liberará de su estado de esclavitud, “Zenchishiki”, el buen amigo leal.

debía hacerse eco de este mensaje esencial para la humanidad: En el fondo existe solamente un solo y único problema sobre la tierra. Cómo devolver a la humanidad un sentido espiritual, como suscitar una inquietud en el espíritu. Es necesario que la humanidad sea bañada desde lo alto y que descienda sobre ella algo así como un canto gregoriano. No se puede seguir viviendo ocupándose sólo de heladeras, política, balances presupuestarios y palabras cruzadas. Así no se puede progresar.”

¿Por qué esta creación le parecía fundamental hoy? Porque la humanidad continúa perdiendo su humanidad y porque la sabiduría de Antoine de Saint-Exupéry podría así ser restablecida a través de esta obra.

Yannick Dabrowski, redactora